Un visionario

Hace 9 años que empecé a trabajar en mi primer empleo.
Bueno, hay quien dice que aún no he empezado, pero vamos, que empecé a cobrar por ir a un sitio a pasar el día.
El caso es que la empresa se llamaba (y aún se llama) JSC, y su plantilla se limitaba a sus dos dueños. Yo fui el primer empleado. Hoy en día son unos cuantos más. Se dedicaban a temas de moviles. Hicieron el primer telefono que devolvía cambio, y el primer sistema de Telerecarga para cargar las tarjetas prepago de telefonica. Cuando entré me plantearon la posibilidad de aportar ideas respecto al mercado de los móviles. He de decir que en aquellos días yo no llevaba movil y que poco después la empresa me puso la primera y única linea de movil que he tenido. El caso es que me lo pensé unos días, y llegué a la conclusión de que llevaba los bolsillos hasta arriba de cosas y que lo último que quería era una más. Al fin y al cabo ya llevaba dinero, y en el remoto caso de que necesitara llamar por telefono (¡¡que absurdo!!) había cabinas por las calles. La única forma de que me interesase llevar un movil encima era que sustituyera a lo que ya llevaba encima.
Y ahí estaba la clave. El movil debía sustituir a las cosas innecesarias que llevaba encima. El dinero, las llaves (las de casa, las del coche y cualquiera que pudiera querer añadir, incluso especifiqué que no debía ser necesaria la batería para que funcionase), el carnet de identidad el de conducir y por supuesto el reloj, pero eso era lo más facil.
¿Y qué veo hoy, nueve años después de aquello en la red? Esto:
http://www.xataka.com/2008/10/21-llave-inteligente-de-bmw
¿¿Cómo se han dejado las todopoderosas operadoras de telefonía comer así el terreno??
En cualquier caso a mi ya se me había ocurrido, hace nueve años. ¡Nueve! ¡¡Casi una decada!!
A mis jefes les pareció interesante lo de pagar con el movil y empezaron a moverlo por las operadoras y aunque los gerentes que visitábamos abrían mucho los ojos cuando se lo contaban, no parecía que nadie nos hiciese caso... hasta que cosa de dos años después apareció algo que se llamó "movilpay". Nunca supimos si fue a raiz de nuestras propuestas o si ya se estaba moviendo desde antes.
Y no os cuento cuando diseñe un navegador en el que se pudiesen ver las distintas páginas que estabas cargando a modo de thumbnails (cuando Internet iba por modem y a pedales... ¡ey! ¡en eso no hemos cambiado tanto!).
Debería haberme forrado y vivir del cuento con mis ideas, y sin embargo nadie sabe aprovecharlas. Ni siquiera yo mismo.
¿Alguien busca un visionario?